El servicio de Urología obtiene una ayuda para su proyecto de en investigación sobre tumores renales con impresión 3D
El proyecto HIRUdREN, liderado el servicio de Urología, han obtenido una ayuda en la convocatoria de proyectos de innovación 2023 del Instituto Investigación Sanitaria Biobizkaia. La impresión 3D se utilizará para valorar el abordaje y desarrollo de la nefrectomía parcial robótica.
El objetivo principal del proyecto HIRUdREN”: Docencia para tumores renales con impresión 3D” es analizar la adecuación del uso de impresión 3D en la interpretación de las características anatómicas quirúrgicamente más relevantes de las neoplasias renales, así como su influencia en la planificación de la cirugía. Para ello, se está realizando un estudio prospectivo de planificación quirúrgica de nefrectomía parcial robótica analizando las posibles variaciones de la técnica, en función de la imagen con la que se haya planificado (Tomografía 2D, Tomografía 3D e impresión 3D) y su implicación en la formación en dicha cirugía. Es decir “mediante la impresión, en formato 3D, tanto del tamaño del tumor como de su relación con las estructuras vasculares y el sistema excretor, valoraremos el abordaje y el desarrollo de la técnica quirúrgica que se utilizará en cada caso clínico” destaca Ana Loizaga, jefa de sección del servicio de Urología.
Este proyecto, iniciado en marzo de 2024, se aplica a los tumores renales susceptibles de ser tratados mediante una nefrectomía parcial, unos 50 al año. Esta cirugía es la técnica de elección en los tumores renales en los que es posible realizar cirugía conservadora. Concretamente, se trata de una técnica cirugía en la que se clampa la arteria renal de la manera más selectiva posible, durante menos de 30 minutos, para lesionar lo mínimo posible la función renal. En este tiempo se debe realizar la escisión tumoral, razón por la que es necesaria una planificación quirúrgica precisa.
Su puesta en marcha “permitirá mejorar el diagnóstico radiológico, así como adquirir conocimientos de las relaciones anatómicas del riñón, planificar la cirugía y adquirir conocimientos en impresión 3D y habilidades quirúrgicas en cirugías complejas” señala Loizaga. Y añade “con ello disminuiremos la curva de aprendizaje de facultativos y residentes y mejoraremos las habilidades de comunicación de estos profesionales con los pacientes, puesto que les permitirá mostrar de una manera más realista y visual las posibilidades terapeúticas.”
Además de facilitar la adquisición de conocimientos y aumentar la cultura de investigación e innovación en este ámbito, este proyecto posee otras ventajas. Entre ellas destaca la mejora de la eficiencia quirúrgica, reduciendo tiempos quirúrgicos, disminuyendo las complicaciones y mejorando los resultados oncológicos y su posible aplicación a otras patologías urológicas muy prevalentes como el cáncer de próstata o la litiasis renal. Así mismo, disminuye la morbi-mortalidad en cáncer renal organoconfinado y aumenta la supervivencia, ya que mejora la elección individualizada de la mejor técnica quirúrgica para cada caso.
En este proyecto han colaborado el servicio de Radiodiagnóstico, la Unidad de Investigación de la OSI Bilbao-Basurto y la Plataforma 3D del IIS Biobizkaia. Y para su realización ha sido aprobado por el Comité Ético de Investigación de la OSI Bilbao-Basurto y el Comité ético de investigación de EUSKADI.